Las bodas de invierno son las escogidas por las novias que adoran la navidad, que eligen dar el sí quiero junto a una acogedora chimenea en vez de al aire libre, y que encuentran en la lana y el cachemir el complemento perfecto a su vestido de manga francesa. En nuestra finca hemos tenido el placer de ser testigos de cómo las bajas temperaturas, han quedado en un segundo plano, cediendo todo el protagonismo a parejas de novios con las ideas muy claras, que sabían que querían que la suya fuese una boda fuera de lo común, empezando por la fecha de la celebración.
Además de ser muy distintas de las bodas de otras estaciones, las que tienen lugar en estos meses varían mucho de un año a otro. Y para conseguir que la tuya sea todo un éxito necesitas ponerte al día de las tendencias para bodas de invierno.
Bodas de invierno: ¿qué se lleva?
Utiliza nuestra finca a tu gusto para lograr ese entorno acogedor donde celebrar tu boda por todo lo alto. Diciembre, enero, febrero…los meses de invierno dan mucho juego y, por nuestra experiencia, son bodas inolvidables. El contraste de temperatura entre el interior y el exterior, la belleza diferente del paisaje que rodea a la Finca Casa de Oficios en esta temporada y las posibilidades que te ofrece nuestra finca, te ayudarán a hacer tu sueño realidad. Para terminar de planificar un día perfecto toma nota de cuatro tendencias que te interesará conocer:
- Colores para bodas de invierno: rojos y verdes sin duda reflejan la temporada, pero exagerar en cualquiera de las dos tonalidades haría perder el foco en lo que se celebra y desviar la atención excesivamente hacia la Navidad. Para no fallar, lo mejor es seguir la recomendación de menos es más. Una paleta de colores muy minimalista, por ejemplo con base en plata y blanco y detalles en cristal sería lo más acertado.
- Las flores: rosas rojas, lirios, calas y amarilis son decididamente variedades apropiadas para bodas de invierno. Sin embargo, para salirse de lo habitual se pueden considerar opciones de flores como las margaritas o los ranúnculos en tonos suaves. Para dar el toque, añadir brillo a las composiciones envolviendo los tallos en cintas embellecidas con cristales.
- Centros de mesa: la decoración de las mesas tiene que resultar impactante y muy atractiva. Tu objetivo es conseguir captar la atención de los invitados y, para eso, puedes incorporar troncos y piñas combinados con ramas invernales tanto en las mesas como en la entrada. Para el interior, velas, mantelerias de telas gruesas y porcelanas serán el punto de partida perfecto.
- La hora de la barra libre: cuando llega el momento del baile y las copas, en las bodas de invierno se presenta la ocasión idónea para introducir bebidas calientes y reconfortantes, que se alejen de la carta de combinados típicos de este tipo de celebraciones. De los mix de sake y vodka a los ponches, del chocolate caliente enriquecido con licor de avellanas a los cócteles escarchados de inspiración polar. Lograrás sorprender a tus invitados.